Marea Editorial

Zambayonny, el hombre informal

Es tomarlo o dejarlo. O mejor aún la otra opción, que es previa a tomarlo: animarse a la escatología que nos permitimos en nosotros pero que no le aceptamos a un artista. Zambayonny, el cantautor políticamente incorrecto, que emplea la fuerza del coloquialismo vulgar para empujar sus ideas de dramas cotidianos, se le anima también a la literatura.

Mañana Mar del Plata será escenario de las dos expresiones artísticas de este barbado hombre al que la clandestinidad lo cobijó y ahora le dio salida hacia las luces de la trascendencia.

A las 17, en la librería de Santa Fe al 1600, Zambayonny presentará su primera novela ?Biografía de un superhéroe? y por la noche se correrá hasta Abbey Road para dar un nuevo -y seguramente- masivo concierto. Previo a su desembarco en la ciudad, el músico y poeta hiperrealista que cobró altura de artista de culto, dialogó con LA CAPITAL.

-¿Cómo estás viviendo tu instalación ya en la masividad, o al menos esta instancia de haber pasado de internet o de algunos modos under de difundir tu música a los discos grabados, programas de televisión, libros escritos, radios que pasan tus temas?

-Yo lo vivo muy tranquilo, porque no es una exposición que no me permita ir a la panadería o hacer un trámite. Se conocen mis canciones y mi nombre, es verdad, pero vivo como siempre. Sinceramente estoy pasando por una etapa que me encuentra muy tranquilo. Por ahí si sos más chico o estás expuesto 40 horas por semana en televisión puede afectarte. Pero no es mi caso.

-Mañana presentás tu libro "Biografía de un Superhéroe", en lo que significa tu aparición en el mundo editorial. El humor vuelve a estar en la pluma de Zambayonny?

-Sí, el libro es una novela de humor, larga, de más de 300 páginas que la editamos con Marea y con buena distribución en todo el país. Ahí se cuenta la historia de dos amigos que se encuentran en Inglaterra, amigos que tienen una relación muy particular con los superpoderes. Hay escenas en Montevideo, en Buenos Aires, en Inglaterra y en otros sitios que el lector descubrirá.

-¿Te sentís a contramano por esto de editar discos, publicar libros, cuando la tendencia es ?piratear? todo?

-Es cierto, un poco a contramano del mundo me siento. Hoy los diarios se leen más por internet que por otra cosa, están los e-books ahora? pero de todos modos creo que todavía hay una cosa de prejuicio con los medios electrónicos. Espero entonces que el libro pueda llegar a la gente.

-¿Zambayonny escritor integral?

-Yo siempre estuve escribiendo. En los medios transcendieron las canciones, pero en realidad yo le dediqué el mismo tiempo a las canciones que a los cuentos y a las novelas. Tengo otras tres novelas escritas pero opté por mostrar esta porque es la que más me gusta.

-¿Cómo definís el género en que querés contar una historia? ¿Porque no es lo mismo un novelista, un cuentista, un autor de letras para canciones?

-Nunca me puse a ver qué era yo. Cuando encuentro una idea que me divierte, a veces creo que es una canción, a veces es un cuento y a veces es una novela. Pero no me detengo a pensar más allá de sentirme por momentos un escritor.

-La psicología es clave en tu vida a punto tal que te han adjudicado el título de licenciado?

-Sí, pero no soy psicólogo.

-De todos modos, cuando se escuchan las letras de tus canciones da la sensación de estar escuchando a un tipo tirado en un diván, en plena terapia?

-Puede tener que ver con el hecho de que todos tenemos los mismos problemas y que esos conflictos no tienen muchas formas diferentes de ser vistos. Mis canciones tienen lo que uno piensa sobre esos temas y si soy sincero la gente se puede identificar. Creo que debe ser eso. Para mí todos damos vueltas y vueltas para llegar al mismo lugar siempre.

-A propósito del léxico que utilizás en muchas de tus composiciones, un lenguaje que atenta contra los buenos modales de cierta gente medrosa, el otro día alguien comentó por ahí que las ?puteadas? suenan bien en la boca de ciertos personajes y en otros suenan exactamente así, una ?puteada?. ¿Cómo creés que se leen tus canciones?

-No me lo puse a pensar. Te diría que las puteadas no suenan diferente según la boca de quien las digan. Muchas palabras que no son malas también suenan forzadas en otras personas, porque la gente se da cuenta cuando lo decís de una manera fingida. Hay mil ejemplos de tipos que están mintiendo y nadie les cree. Por eso para mí el valor de un testimonio es la sinceridad.

-Tenés muchas canciones sin ese lenguaje, bellísimas canciones como "Las horas perdidas" o "El whisky de dios" ¿Qué prioridad le das a ese tipo de composiciones respecto a las otras como "La Incogible" o "Yo los considero mis hermanos"?

-A veces sentís que la canción tiene un ritmo, un humor, un motor interno y se tiene que contar así. Las palabras son esas, no hay otras. Yo no puedo contar algo de una manera más rebuscada e intentando ser poético porque tal vez eso termine quitándole fuerza a la historia. Igual el disco nuevo es un poco diferente a "Salvando las distancias". Hay de esas canciones?

-A partir de la estética elegida para hacer tu arte conseguís adhesiones entusiastas y rechazos irreversibles? ¿te afecta cualquiera de las dos posiciones?

-No puedo decir que me agrade que a cierta gente no le guste. No podés ser necio, querés que a la gente le guste. El tema es que, hagas lo que hagas, siempre habrá gente a la que no le guste, porque la gente tiene pensamientos divididos. Entonces hay que estar contento uno mismo. Si tengo que elegir, elijo la idea que más me gusta y me pone contento.

-¿El show de mañana mostrará cosas nuevas o forma parte del concepto anterior?

-Estamos cerrando ?Salvando las distancias?, que es el disco anterior y fue una etapa muy agradable. Seguramente las canciones nuevas aparecerán pero la base es la de los shows que dimos en el verano, a manera de despedida de esa etapa. Mar del Plata es un punto en el que me tratan bien. Siempre que voy a un lugar me preguntan, este público local es medio raro ¿no? Cada ciudad piensa que su público es difícil, pero la verdad es que Mar del Plata me acompaña muy bien y estoy seguro de que ocurrirá lo mismo esta vez.